Las operadoras, tanto Movistar como Vodafone y MasOrange, tratan de dosificar sus servicios lo máximo posible para obtener una mayor cantidad de ingresos. Pero los últimos movimientos que se han producido en el mercado y sus propias decisiones, como el cierre del negocio por parte de Vodafone, dejan claro que todas ellas están sufriendo con sus divisiones dedicadas a la electricidad.
Tuvo mucho sentido que, las operadoras, vieran hace tres años una oportunidad de oro en la electricidad. Si tenían una base de clientes millonaria, era de cajón que podrían sacarle partida de otras maneras. Y su éxito con los servicios de televisión les daba pistas sobre cómo podrían probar otras iniciativas. No obstante, con el paso del tiempo ha quedado claro que la electricidad no ha sido el negocio que esperaban.
Vodafone se ha retirado de la electricidad
De esto te hablamos hace unas semanas en relación a Vodafone Energía. En su proceso de reestructuración, Vodafone tomó la decisión de abandonar su negocio dedicado a la electricidad. Y se trata, sin duda, de una decisión muy conveniente, puesto que de esta forma van a poder concentrarse en lo que de verdad importa: los servicios de telecomunicaciones. No es la única decisión reciente que ha tomado la operadora, quien tiene intención de volver a sus orígenes por medio de una estrategia que le aporte estabilidad.
Tal y como distintos expertos han afirmado, se trata del mejor enfoque por el que podrían haber optado, en especial a la vista de las buenas impresiones que está teniendo Vodafone en las últimas semanas. A partir de aquí, se espera que el progreso de la operadora continúe siendo positivo y que así recuperen todo el brillo que tuvieron en el pasado al concentrarse en sus servicios más fundamentales.
La situación de MasOrange y Telefónica
En el caso de MásMóvil, la operadora ha tenido un recorrido muy distinto al de Vodafone en el sector energético. Comenzó en el año 2016 y llegó a gozar de gran éxito en el mercado, pero en el momento en el que se produjo la crisis de 2022, cuando los precios se dispararon, se encontraron con que el negocio dejaba de ser viable. En ese momento tomaron una decisión crítica: detener las contrataciones para que su apuesta energética dejase de crecer hasta que la situación se encontrase en un punto de mayor estabilidad.
Aunque eso hizo pensar que podría haber supuesto el final de su iniciativa eléctrica, con la fusión con Orange, ahora MasOrange ha decidido relanzar su apuesta. Lo hace con cuatro empresas distintas: PepeEnergy, que fue su primera marca adquirida en 2016, Lucera, MásMóvil Energía y EnergyGo. La filosofía continúa siendo, en parte, la que siempre han tenido: ofrecer sus servicios eléctricos como extra para los clientes de algunas de sus operadoras, como ocurre en el caso de Pepephone o Yoigo.
Desde MasOrange, aunque pasaron momentos negativos en el pasado, vuelven a ver este negocio como una oportunidad. Disponen de 200.000 clientes sumando sus distintas iniciativas y afirman con ambición que quieren llegar muy alto y convertirse en la alternativa de luz y gas más importante del país. Por supuesto, su situación es muy distinta a la de Vodafone y no hay que dejar de lado que ya, durante varios años, estuvieron en lo más alto en cuanto a sus datos en el sector eléctrico.
En tercer lugar, Telefónica todavía no ha llegado al estado en el que ha terminado Vodafone Energía, pero su apuesta por la energía tampoco ha dado buenos resultados. No obstante, hay que tener en cuenta que Telefónica no apostó por competir en el sector de la misma forma en la que lo hicieron Vodafone y MasOrange. La empresa firmó un acuerdo con Repsol y lanzaron una iniciativa conjunta al 50% conocida como Solar360.
Esta empresa, no obstante, tampoco ha despegado. Se concentra en la instalación de paneles solares, pero sin exclusividad para los clientes de Movistar. No hay datos públicos y los que transmite CincoDías en el reportaje que han hecho sobre la materia, hablan de unas pérdidas registradas de 7,3 millones de euros en 2022. Desde entonces no se han publicado datos, así que habría que dejar una ventana abierta a que Solar360 se haya recuperado y esté obteniendo unos resultados mejores.
En contraposición a estas cifras, las operadoras encuentran sus mejores datos y resultados en los mercados de la fibra y las líneas móviles, donde mantienen su autoridad y liderazgo. Incluso Vodafone, que ha pasado por momentos difíciles, está levantando el vuelo con su reinvención tras la adquisición realizada por el grupo Zegona. Esto confirma que, a todas luces, las operadoras deberían seguir concentrando sus esfuerzos en aquello que mejor se les da, que no es otra cosa que el mercado de las telecomunicaciones, donde tanto Movistar como MasOrange y Vodafone, son tres nombres fundamentales. De todas formas, habrá que ver cómo se desarrollan los próximos meses y de qué forma progresan las iniciativas restantes en electricidad de estas empresas.
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