Durante años he confiado en Google One para guardar mis cosas, pero últimamente me lo estoy replanteando. Y no porque quiera complicarme, sino porque hay opciones mejores, más baratas o más útiles para lo que necesito. Sigo teniendo una suscripción activa, eso no lo voy a negar. Pero solo porque tengo mi bandeja de Gmail a reventar de correos acumulados desde hace más de una década. Si no fuera por eso, ya habría dicho adiós. Y si tú también te estás planteando si merece la pena seguir pagando por Google One, te dejo aquí mis razones para ir tomando distancia.
Google One es el servicio en la nube del gigante de Internet, donde tendremos mucho espacio de almacenamiento compartido con todos sus servicios como Gmail, Google Drive o Google Fotos. Para muchos usuarios el uso de Google One es imprescindible, porque ya han agotado los 15GB de almacenamiento gratuitos que proporcionan.
Google Drive ya no es la mejor opción para todos
Durante un tiempo, Google Drive fue la solución perfecta para guardar documentos, fotos y cualquier archivo que quisiera tener siempre a mano. Pero hoy en día hay muchísima más competencia, y dependiendo del ecosistema que uses, puede que tenga más sentido irte con otra plataforma.
Si tienes un iPhone o usas un Mac, iCloud+ se integra mucho mejor con tus dispositivos. Y si usas Windows, OneDrive tiene una ventaja clara: guarda el escritorio, las carpetas importantes y sincroniza sin que tengas que preocuparte por nada. Google Drive sigue funcionando bien, eso no lo discuto. Pero si no estás metido en Android o ChromeOS, no tiene mucho sentido pagar por algo que no usas al 100 %.
Las funciones de IA no me compensan
Google ha apostado fuerte por la inteligencia artificial con funciones como Gemini o Magic Editor, pero la realidad es que, al menos en mi caso, no me aportan demasiado. El editor de fotos con IA está bien para quien lo use a menudo. Pero yo apenas edito imágenes. Y lo de pagar 10 € más al mes para acceder a Gemini Advanced… no lo veo nada claro. No necesito que me redacten textos ni que me resuman PDFs, y cuando lo he probado, las respuestas no siempre han sido fiables.
Si la IA fuese un añadido útil dentro del plan, quizás me lo pensaba. Pero como reclamo principal, me parece flojo. Prefiero pagar por algo más práctico o directamente no pagar si no lo necesito.
Los descuentos de la Google Store no valen la pena
Otra de las cosas que incluye Google One, al menos en los planes de 200 GB o más, son descuentos en la Google Store. Pero seamos sinceros: ¿cuántos productos de esa tienda usas realmente?
A no ser que seas fan de los móviles Pixel, de sus auriculares o del reloj, no hay gran cosa que justifique el descuento. La gama Nest está algo estancada, y con todo el lío del cambio del Asistente de Google a Gemini, no me da mucha confianza para seguir ampliando mi casa inteligente con sus productos.
Así que ese supuesto valor añadido, en mi caso, se queda en nada.
Prefiero una copia de seguridad local bien hecha
Hace poco invertí en un SSD externo de 2 TB y ha sido una de las mejores decisiones que he tomado. Guardo ahí mis archivos importantes: documentos, vídeos, fotos antiguas y todo lo que no quiero perder. Y lo mejor es que no tengo que depender de la nube para acceder a ellos.
Además, por menos de 120 € he conseguido una solución que no tengo que renovar cada año como sí pasa con Google One. Es verdad que hay que tener cuidado (un SSD no resiste una inundación ni un robo), pero para eso tengo una combinación de copia local + copia mínima en la nube.
No se trata de renunciar por completo a la nube, sino de pagar solo lo justo. Y Google One, tal y como está ahora mismo, me ofrece más extras que no necesito que ventajas reales.
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